Son un poco entretenidos de hacer pero como para que estén más buenos es mejor hacerlos el día antes eso que te ahorras, el día de la fiesta no tienes que estar metida en la cocina, basta con calentarlos y a disfrutar!
Como es una receta de "boquilla" las cantidades de los ingredientes son un poco a ojo de buen cubero y teniendo en cuenta cuantos sois.
Primero se han de comprar los calamares, que han de ser "mega calamares" de 1Kg para arriba, lo mio fue una odisea, se ve que son de temporada y que no siempre hay en las pescaderías, se los encargué a todo el mundo; a mi madre, a mi suegra, a Mª Ángeles... todas movilizadas para ver quien los encontraba y no hubo manera, hasta hace una semana no los encontró mi suegra en la plaza del barrio, y os podéis imaginar el precio a una semana vista de navidad! (lo comido por lo servido, realmente valió la pena gastarse el dinero)
Una vez los tenemos hay que limpiarlos (a mi personalmente me da un asco que me muero y tengo algún que otro secuaz para los trabajos sucios, dícese de mi madre o mi suegra) y darles la vuelta, más vale que hayáis desayunado, menudo trabajón entre el guapet y yo nos las vimos y nos las deseamos!
Una vez hechos los trabajos de acicalamiento se trocean las patitas y las aletas a trozos pequeños (ya os he avisado de que era laborioso).
En una olla, sartén o en cualquier sitio que luego os quepan los calamares, se pocha bastante cebolla cortada pequeñita, cuando está bien blandita se añade el calamar troceado anteriormente. Si veis que os vais a quedar cortas con el relleno se puede añadir un calamar o dos, de los normales, cortados pequeñitos.
Cuando esté pochado todo se le añade un puñado de carne picada de ternera, se rehoga. Se le añaden 2 o 3 huevos duros cortados pequeños y 2 o 3 cucharadas de tomate frito casero.
Por otro lado se pelan y se trocean 1 Kg de gambas, si, si habéis leído bien, 1 Kg de gambas (en mi caso fueron langostinos porque las gambas me dan alergia), y se sofríen en una sartén con unos ajos, sólo vuelta y vuelta, si no luego queda muy sequerón el relleno, ya se acabarán de hacer después.
Una vez mezclado todo se prosigue a rellenar los calamares, con cuidado porque como dijo Julia Roberts en Pretty woman "estos mamones resbalan!"
Al darles la vuelta a los calamares cuando los limpiaba tuvimos un percance y uno de ellos se abrió por uno de los laterales, una vez rellenos tuve que hacerle una cura de urgencia (casi no se nota que soy enfermera...)
Una vez rellenos se doran los calamares en aceite y un chorro generoso de vino (Jerez, blanco o coñac, lo que se tenga por casa, yo le puse Fino).
Añadir salsa de tomate casera y dejar cocer los calamares a fuego lento hasta que estén hechos (en mi caso les añadí un vasito de agua y esperé a que redujera la salsa).
Al día siguiente, porque los hice la víspera para que estuvieran más buenos, los calenté en la misma olla y los corté a rodajas para servir, se pueden acompañar de arroz blanco o unas patatas a tacos o solos como hice yo, y están de rechupete!!!!!!!!
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